Un seguro de salud entrega cobertura y respaldo económico como complemento a las prestaciones que el sistema no alcanza a financiar. En ese sentido, un seguro podrá incluir diferentes coberturas para casos de maternidad, salud mental o tratamientos dentales.
Acceder a un seguro de salud es sinónimo de tranquilidad y seguridad, ya sea para el grupo familiar o para un profesional joven. Y es que gracias a los diferentes planes que existen, hoy en día es posible contar con atención oportuna sin la preocupación de una deuda médica.
Contratar un seguro de salud va más allá de la planificación y prevención. También se trata de escoger libremente cómo atenderse y a qué prestadores escoger, teniendo siempre la certeza de poder acceder a un tratamiento de salud en cualquier momento.
En ese sentido, un buen seguro será capaz de entregar una cobertura que cubra imprevistos o urgencias, así como también diferentes atenciones médicas.
Sin embargo, los diferentes planes que existen también permiten personalizar y singularizar las prestaciones y beneficios, agregando las denominadas coberturas adicionales.
Una cobertura adicional se da cuando los seguros de salud ofrecen diferentes opciones para reforzar el plan, incluyendo financiamiento o reembolsos para atenciones que no estarían incluidas en el plan básico
Los casos más comunes son las atenciones personalizadas para maternidad, odontología, atenciones hospitalarias o incluso de salud mental. Conoce sus detalles y condiciones a continuación:
Dentro del universo de seguros complementarios y sus prestaciones básicas, es posible integrar, según las necesidades individuales de cada afiliado, una cobertura específica para, por ejemplo, casos de maternidad.
Esto entrega respaldo y tranquilidad financiera a la hora de un parto, cubriendo así los gastos de exámenes y hospitalización para este proceso.
Sin embargo, quienes deseen contratar este tipo de cobertura deben considerar, tras una evaluación, la afiliación a la que pertenecen (Fonasa o Isapre), ya que de esto depende una serie de condiciones al momento de contratar un seguro con cobertura para embarazo.
¿Por qué? Porque dependiendo del plan de salud, existen topes de cobertura para embarazo y parto. Según datos de la Superintendencia de Salud, la cobertura en este tipo de casos será variable.
Por ejemplo, en una Isapre, el tope de cobertura mínima deberá ser proporcional al número de meses transcurridos desde la contratación del plan hasta el momento del parto, además del total de meses de duración del embarazo. En el caso de Fonasa, por su parte, la cobertura dependerá del tramo de afiliación y complejidad del embarazo.
En caso de accidente o tratamiento médico que requiera una estadía, compleja o no, en un hospital o clínica privada, un seguro complementario con cobertura adicional podrá financiar los aspectos económicos de una hospitalización.
En ese sentido, este tipo de cobertura puede reembolsar aspectos como:
En definitiva, este tipo de cobertura otorga una indemnización diaria ante cualquier caso de hospitalización.
Si bien algunos seguros no contemplan de manera estándar las atenciones odontológicas, es posible ampliar la cobertura y agregar este tipo de atención. En ese caso, un seguro con cobertura dental podrá costear atenciones como:
La salud mental es una preocupación creciente en la sociedad y en quienes buscan acceso y cobertura de salud.
Hoy, existen diferentes planes de seguros con coberturas exclusivas que pueden incluir atenciones de salud mental, pese a que esta materia no esté incluida de manera estándar en las pólizas.
¿Cómo acceder? Revisando y evaluando las alternativas y condiciones de cada seguro que pueda ofrecer este tipo de prestaciones.
En ese sentido, un seguro complementario puede costear parcialmente atenciones médicas particulares de psicología o psiquiatría, por ejemplo.
Por lo general, los seguros y el sistema de afiliación de salud ofrecen facilidades y convenios a la hora de adquirir medicamentos, entregando a los titulares o beneficiarios la posibilidad de acceder a descuento o beneficios para la compra de fármacos
Por ejemplo, un seguro para medicamentos, incluido en seguros complementarios, puede incluir beneficios como:
Al momento de evaluar la contratación de un seguro, cada persona debe considerar individualmente, o con su grupo familiar, las diferentes necesidades de salud a corto y largo plazo, teniendo en cuenta situaciones como enfermedades o un embarazo.
De aquella evaluación dependerá el tipo de seguro y sus condiciones, precios y características. Por ejemplo, para personas menores de 30 años, un seguro catastrófico es la opción más conveniente ya que involucra el pago único de un deducible alto, pero una prima mensual baja para una cobertura total.
Es por ello que investigar y decidir de manera informada y voluntaria es fundamental para encontrar el plan que mejor se adecúe a la realidad de cada uno, ofreciendo así tranquilidad y certeza económica y de salud.