Antes de contratar un seguro de auto, un aspecto fundamental a considerar es su alcance de cobertura y la duración. Esto determinará valores y te entregará la certeza de contar con protección por un tiempo determinado.
Entre todas las alternativas de seguro disponibles actualmente, aspectos integrales como la cobertura, características y duración son elementos muy relevantes a la hora de contratar.
Es por ello que antes de comprar un vehículo, nuevo o usado, es fundamental considerar las diversas opciones de seguros automotrices disponibles y revisar sus características.
Recuerda que la contratación de un seguro entrega cobertura financiera y protección en caso de robos o accidentes, dependiendo de sus características y requisitos específicos.
Esos requisitos incluyen el pago de una prima mensual o un deducible, así como consideraciones sobre el vehículo como su antigüedad y modelo.
Además, pueden existir diversas condiciones de asegurabilidad que determinan las limitaciones y exigencias de la cobertura, ayudando a gestionar el riesgo financiero y determinar también la duración o tipo de cobertura.
Teniendo en cuenta las necesidades individuales de quien contrata y según las exigencias de la aseguradora, es posible encontrar pólizas con diferentes formatos de duración. Esto, debido a que aspectos como la duración está determinado en el contrato a través de las condiciones particulares.
Por lo general, las aseguradoras ofrecen contratos que duran un año, aunque también hay opciones para coberturas de 6 meses o incluso menos, si el proveedor permite acordar la extensión al momento de adquirir el seguro automotriz.
Un ejemplo son los seguros temporales, que brindan cobertura solo para actividades específicas como un viaje o una cantidad determinada de kilometraje recorrido, donde se requiere una protección más limitada a esa situación particular.
Aunque la ley obliga a tener el Seguro Obligatorio de Accidentes Personales (SOAP), este solo cubre ciertos tipos de accidentes. Por lo tanto, contratar un seguro automotriz adicional y voluntario es una opción recomendable para reducir costos imprevistos y contar con protección permanente.
Las condiciones particulares de la póliza permiten conocer ciertas características que singularizan la cobertura según tus propias necesidades. En ese sentido, aspectos como la duración y renovación es materia del contrato en esta etapa.
Conociendo la duración determinada de cada póliza, la renovación es un proceso que la aseguradora gestiona automáticamente al contar con tu aprobación, gestionando la extensión de la cobertura por otro año o período. Por eso es importante que cada fecha esté estipulada en cada contrato a la hora de firmar.
No obstante, si cumplido el período de cobertura necesitas otra prestación o encontraste una mejor oferta, puedes no renovar tu seguro y cambiar de compañía. El único requisito es notificar por escrito un mes antes del término de la cobertura. Así, podrás iniciar el proceso de cambio y contratar otro seguro.
Además de tener en cuenta la cobertura, son otras las características que regulan el tipo de contrato y además el valor de su prima.
Por ejemplo, la marca y modelo del vehículo es un criterio esencial para fijar el costo, además de otros indicadores como estadísticas de accidentes vinculados, historial del conductor, disponibilidad de repuestos, reparaciones y más.
Estos elementos son variados y complejos, determinados en primera instancia por las características propias del vehículo. Es por ello que además de considerar la cobertura y su duración, revises y entiendas cada indicador para tomar una decisión informada y conveniente.