El seguro de cesantía es una póliza voluntaria que se contrata como protección adicional de manera independiente o puede estar asociada a un crédito hipotecario o de consumo para cubrir el pago de cuotas en caso de cesantía.
En un mundo laboral contar con un respaldo financiero en caso de desempleo puede marcar la diferencia.
El seguro de cesantía es una herramienta clave que permite proteger el pago de obligaciones financieras, ya sea de manera independiente o asociado a un crédito hipotecario o de consumo.
Su principal objetivo es ayudar a los asegurados a mantener su estabilidad económica, mientras buscan una nueva oportunidad laboral.
Para los efectos de la cobertura, se establece un período activo mínimo, de carencia, de antigüedad laboral mínima, un deducible, y/o una franquicia, así como el máximo de eventos al año indemnizables bajo esta póliza, conforme a las condiciones ofrecidas por la compañía aseguradora, lo que queda debidamente señalado en las condiciones particulares de la póliza.
A lo largo de este artículo, explicaremos los distintos tipos de seguros de cesantía, su funcionamiento y las diferencias con el Seguro de Cesantía controlado por la Administradora de Fondos de Cesantía (AFC), para que puedas tomar decisiones informadas sobre tu seguridad financiera.
Permite cubrir el pago de cuotas del crédito hipotecario si el asegurado queda desempleado por razones ajenas a su voluntad. La cantidad de cuotas cubiertas varía según lo estipulado en la póliza.
Cubre el pago de cuotas de un crédito financiero durante un período determinado. Es fundamental revisar las condiciones del contrato para conocer el alcance exacto de la cobertura.
Aplica a los créditos otorgados por cajas de compensación, con regulaciones establecidas por la Superintendencia de Seguridad Social. Es recomendable consultar directamente en www.suseso.cl para más información.
Es importante no confundir las coberturas adicionales ofrecidas por las compañías de seguros que protegen a los trabajadores desempleados en el pago de sus créditos con el derecho que protege a todos los trabajadores afiliados a una AFC cuando quedan cesantes.
Los recursos del seguro de cesantía son acumulados a través de la cotización individual y se encuentran en la Cuenta Individual de Cesantía (CIC), que es de propiedad del trabajador, y en el Fondo de Cesantía Solidario (FCS).
El FCS es un fondo común de reparto, cuyos recursos son aportados por el empleador y el Estado. Por ello, la propiedad de los recursos no pertenece a ninguna persona en particular, sino que a todos los trabajadores afiliados al seguro de cesantía.