Un seguro de salud puede ser contratado de manera voluntaria, individual o colectiva. Esto significa suscribir un contrato con una compañía de seguros, denominado póliza, la cual tiene una vigencia definida y contiene ciertos criterios particulares como edad máxima, la exigencia de una declaración de salud previa, condiciones, montos y otras opciones que se regirán según las condiciones generales y particulares.
Los contratos o pólizas y sus condiciones generales pueden identificarse y consultarse según la nomenclatura POLXXXXXX en el sitio web de la CMF.
Existen varios tipos de seguros de salud, como catastrófico, gastos médicos, complementario, dental y hospitalización, entre otros. Los seguros catastróficos suelen incluir un deducible o franquicia mínima antes de activar la indemnización, así como otro tipo de condiciones.